El 19 de junio de 2010 una multitud de suecos celebró con orgullo y alegría la boda de su futura reina la PrincesaVictoria de Suecia y Daniel Westling, que finalmente se dieron el sí después de 8 años de noviazgo.
Desde muy temprano los suecos se congregaron a lo largo de las calles de Estocolmo para esperar a los novios y acompañarlos a lo largo de los 7 kilómetros del recorrido que hicieron para llegar a la Catedral de San Nicolás (Storkyrka), donde la Princesa Victoria de Suecia pronunció el “sí quiero” rodeada de los más de mil invitados a la boda.
A la ceremonia realizada en la Catedral de Estocolmo asistieron 1.200 invitados, entre los que se encontraban representantes de la realeza y la nobleza europea, políticos y famosos de todo el mundo.
Victoria de Suecia lucía un vestido blanco perla de seda con escote de barco y una larga cola diseñado por Pär Engsheden. En la cabeza la Princesa Victoria llevaba una diadema que Napoleón regaló a Josefina. El velo de la novia era el mismo que usó su madre la Reina Silvia en su boda en 1976.
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